El proyecto Infinite monitoriza sin contacto el ciclo de vida de las estructuras aeronáuticas Liderado por el centro tecnológico socio de Hegan, IDEKO, este proyecto europeo utiliza microhilos para controlar el estado de las estructuras de fibras de carbono para asegurar su calidad, sin necesidad de equipar las piezas con sensores cableados. Fuente: Grupo SPRI 11/03/2025 El proyecto Infinite busca desarrollar un sistema de monitorización sin contacto de todo el ciclo de vida de estructuras aeronáuticas fabricadas con fibra de carbono. Para lograrlo incorporará microhilos ferromagnéticos en la materia prima. Este proyecto europeo, coordinado por el centro tecnológico Ideko, pronto concluirá tras tres años de trabajo. A través de este sistema de monitorización se podrán controlar las diferentes etapas de fabricación de la fibra de carbono para asegurar su calidad, sin necesidad de equipar las piezas con sensores cableados. Asimismo, se controlará el estado de salud de dicho material a lo largo de toda su vida útil. “Se podrá documentar y digitalizar la huella de cada componente; se controlará su trazabilidad: su fabricación y su mantenimiento y/o reparación durante su ciclo de vida”, resume el coordinador del proyecto, Peio Olaskoaga. Infinite nació a partir de los trabajos del Grupo de Magnetismo de la Escuela de Ingeniería de la Universidad del País Vasco en Donostia, liderado por Arkady Zhukov, fundador de la empresa especializada en microhilos amorfos magnéticos Tamag. Ideko y Gaiker entraron en contacto con estas actividades, y tras comprobar el potencial de la tecnología y el encaje dentro del programa Horizon 2020, decidieron formar un consorcio y preparar una propuesta con la idea de financiar estas actividades. “Tras un primer intento fallido, en setiembre de 2021 presentamos una nueva propuesta, conseguimos aprobarla y situarla en una posición de recibir financiación”, explica Peio Olaskoaga. Con el consorcio formado y una vez había conseguido una financiación de 5,5 millones de euros, el proyecto Infinite comenzó su actividad el 1 de junio de 2022. Tras 36 meses de trabajo, el proyecto europeo finalizará en junio de este año. Aunque queden tres meses de trabajo, “todavía seguimos realizando ensayos para tratar de mejorar las señales y su tratamiento”, apunta el coordinador del proyecto. “Todavía queda mucho trabajo de documentación y demostración final de la capacidad de la tecnología”. Ideko es el coordinador del proyecto, por eso su rol principal es el de gestionar los recursos, asegurar la orientación hacia los objetivos marcados en la memoria de proyecto, coordinar las actividades y mantener la interlocución con los organismos de control de la Comisión Europea. Aun así, como centro tecnológico especializado en tecnologías de fabricación, trabaja en el monitoreo de los procesos de fabricación. ...//...Noticia completa